domingo, 26 de diciembre de 2010

El cabreo que llevo

En estas fechas tan entrañables en las que todos somos mas buenos que el pan, el cabreo que llevo no me lo quitan ni con turrón.
Al presidente de mi CC.AA le ha dado por felicitarnos las Pascuas a todos sus trabajadores, en especial a los que nos dedicamos a la enseñanza, con una bajada de sueldo y quintando derechos laborales, que para que queremos derechos si con trabajar nos basta, que nos hemos acostumbrado a vivir como marqueses cuando en realidad somos unos muertos de hambre que con comer ya nos basta. Usted motivemos que ya vera como trabajamos. Dice usted Sr. Presidente que son medidas extraordinarias, que nos toca apretarnos el cinturón que el Gobierno de España nos bajo el sueldo y no nos quejamos y que a usted por un quitarme unos céntimos le hemos montado el belén, pues mire, personalmente me jode mucho que me bajen el sueldo, no le voy a decir que no, pero si me lo bajan me aguanto por que se que hay ciudadanos y ciudadanas que están peor que yo, y si con una parte de mi sueldo se puede hacer algo que se haga, pero lo que no es de recibo, es que nos baje el sueldo, nos llame lindeces varias y que en un par de días nos ponga como ejemplo de buenos trabajadores y que son solo los cara duras( que son pocos) los que manchan nuestra profesionalidad abusando de las bajas y del sistema de pagos.
Sr. Presidente de la Región no le voy a pedir que dimita ni le voy a llamar cosas bonitas como hacen los de su partido cuando el agua no baja por la senda que creen la buena, solo le voy a pedir que sea honesto con los que vivimos y trabajamos en esta Región, que si tiene que tomar medidas que las tome, lo que si que le voy a pedir es que no nos tome por tontos a los murcianos y murcianas, que se olvide de su tono altivo y chulesco y hable con claridad. No tire balones fuera y quiera culpar al vecino de que la casa este sucia, a mi desde pequeño me han enseñado una cosa y es a responsabilizarme de mis actos y ser consecuente con ellos.
Y lo que me gustaría es darle las gracias por el cabreo que me ha dado, y por lo bien que me ha sentado el turrón estos días gracias a usted y que no se preocupe usted por nada que cuando vuelva a mi puesto de trabajo lo haré como usted dice, como en la empresa privada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario